9 Consejos prácticos para conservar la paz, en estos tiempos de guerra.

Consejos prácticos 

para conservar la paz,

 en estos tiempos de guerra

Estos tiempos tribales que estamos viviendo en Venezuela, 
ponen a prueba toda nuestra capacidad de “super-vivencias”. 

Declaro que quiero vivir en paz! 

  Para ello, me valgo de todos los recursos que están disponibles para mi, 

dentro y a mi alrededor. 

 He aquí lo que he aprendido:

1. Caminar pausadamente, 
    sintiendo cada paso, 

           consciente de cada movimientos, 

               un pasito a la vez, 

                   despertarse y ver el paisaje, 

                        la gente, 

                            la escena, 

y zambullirse en el sistema, 

dibujarse una sonrisa y 

mirando a los ojos de quien se encuentre en el camino,

 recibir las sonrisas de vuelta, 

esto alegra el andar, 

es sembrar y cosechar flores en el camino, 

así se disfruta el caminar.

2. Hacer cada labor doméstica con cuidado y atención, 

enfocándose en cada movimiento, 

consciente, 

sin pensar en nada mas 

que en lo que se está haciendo, 

ni para atrás en el pasado, 

ni para delante en el futuro.

3. Poner atención a tu cuerpo, 

las dolencias siempre te indican por donde andas tus pensamientos y tus emociones discordantes. 

 Yo consulto el “diccionario de la bio-descodificación” en internet, 

que siempre me chismea eso que no quiero ver ni escuchar, 

de las emociones dañinas que estoy teniendo 

y me ofrece una afirmación que me ayuda a sanar.

4. Al re-conocer las emociones, 
energía o vibración discordante que se está sintiendo,
 aceptarlas como seres humanos que somos, 
perdonar nuestra vulnerabilidad, 
abrazar a nuestro propio niño que aprende, 
darse una palmadita y animarse viendo todo lo que se ha caminado para llegar hasta aquí, 
todo lo que se ha logrado, 
alcanzado, 
aprendido y felicitarse uno mismo reconociendo lo “Gran-Dios@s” que somos.

 Así, poco a poco, emoción por emoción, nos vamos sanando a nosotros mismos.

5. “Un día a la vez”, es un buen consejo, 

por ejemplo con el “danos hoy el pan nuestro de cada día”,

 tomarse un dia a la vez, 

si hay comida para todos el día de hoy, 

es un buen día, 

agradecer y tomárselo con calma,

 mañana será otro día. 

Tener confianza de que nunca falta el pan en nuestra mesa, aquí y ahora.

6. Un bocado a la vez, como me enseñó mi familia mexicana con sus tortillas y su deliciosa forma de comer, 
cada bocado que le doy a mis niños es especial, 
un poquito de cada cosa, 
maicito, 
carnita, 
vegetales, 
caraotas, 
un bocadito a la vez, 
disfrutando cada bocado, 
sintiendo conscientemente, 
así, 
recibimos la medicina del alimento con gratitud, 
aquí y ahora.

7. Disfrutar el momento del baño diario, 
como una ceremonia personal, 

recibir con agrado el contacto con el agua, 

que templa el cuerpo, 

despierta los sentidos, 

aquieta la mente, 

calma las emociones y nos “Cambia el Brete!”. 

(Si no se tiene una buena cascada en casa, visitar a la hermana que con gusto te recibirá para que te bañes en su delicioso pocito de agua fresca).

8. Hacer algo con las manos, 
yo como estoy un poco loca, 

pinto las paredes con Chuchú, 

pero cada uno debe encontrar 

hacer algo que le gusta, 

con sus propias manos, 

para usar el tiempo de ocio 

ocupando la mente en algo práctico, 

mejor si es productivo y/o artístico.

9. Salir a pasear diariamente, así se hace la conexión con la comunidad, saludar a los vecinos, observar el medio ambiente que rodea la casa donde habitas, reconocer los árboles, los pájaros, los charcos, lo que seas capaz de ver.

Estas prácticas diarias, nos mantienen atentos al aquí y al ahora, nos aleja de las maquinaciones mentales que nos tienen presos en preocupaciones e ilusión de control (o falta de control), nos ayuda a fluir con la energía, con la fé y la confianza de que toda tormenta es pasajera, solo hay que aguantar con buena cara.

Como viviendo en un personaje de super-heroína en tiempos difíciles, 

siempre listas... 

Marilove -